RESUMEN:
«CUANDO ACONTECEN DIVINAMENTE HECHOS DE ESTA CLASE FUERA DEL ORDEN DE LAS CAUSAS SEGUNDAS, SE LES DA EL NOMBRE DE MILAGROS, PORQUE ES MARAVILLOSO (MIRUM) VER UN EFECTO E IGNORAR SU CAUSA».


TEXTUAL:
CAPITULO 136 Sólo Dios puede obrar milagros

§275. Puesto que todo el orden de las segundas causas y su virtud proceden de Dios, y puesto que Él mismo no produce sus efectos necesariamente, sino por libre voluntad, como antes se ha dicho (cap. 96); es evidente que puede obrar al margen (praeter) de las causas segundas, como curar a los que no pueden ser curados según la operación de la naturaleza, o hacer otras cosas que no son conformes al orden de las causas naturales y que, sin embargo, lo son respecto al orden de la Providencia divina. Porque, lo que Dios hace algunas veces fuera del orden de las cosas naturales por Él establecido, lo hace para algún fin. CUANDO ACONTECEN DIVINAMENTE HECHOS DE ESTA CLASE FUERA DEL ORDEN DE LAS CAUSAS SEGUNDAS, SE LES DA EL NOMBRE DE MILAGROS, PORQUE ES MARAVILLOSO (MIRUM) VER UN EFECTO E IGNORAR SU CAUSA. Por ser Dios una causa en Sí misma oculta para nosotros, cuando hace alguna cosa al margen de las segundas causas que nos son conocidas, estamos en presencia de un milagro propiamente dicho (simpliciter miraculum). Si, por el contrario, produce un efecto cuya causa es desconocida para éste o para aquél, a este efecto no se le llama propiamente milagro, porque sólo lo es para aquel que ignora la causa. Por ello, una cosa que a uno le parece maravillosa, no lo es para otro que conoce la causa.



FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Compendio de Teología (Libro) , , Ed.Rialp, 1980 Madrid Libro I: [Sobre la Fe]; Parte I: [Sobre Dios uno y Trino]; Tratado III: [Sobre las obras de Dios], Secc.2ª [Sobre el gobierno del mundo]


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Compendio de Teología Ed. Rialp, Madrid, 1980 (1269)


CLAVES: Providencia o gobierno > Providencia divina > Milagros