RESUMEN:
Sólo quien sabe escuchar a Dios es capaz de hablarle. La sordera es la causa de la mudez.


TEXTUAL:
p. 16 Muchos sabían rezar de pequeños, pero en cierto momento lo olvidaron. ¿Hay que aprender a hablar con Dios?

El órgano de Dios puede atrofiarse hasta el punto de que las palabras de la fe se tornen completamente carentes de sentido. Y quien no tiene oído tampoco puede hablar, porque sordera y mudez van unidas.



Es como si uno tuviera que aprender su lengua materna. Poco a poco se aprende a leer la escritura cifrada de Dios, a hablar su lenguaje y a entender a Dios, aunque nunca del todo. Poco a poco uno mismo podrá rezar y hablar con Dios, al principio de manera muy infantil -en cierto modo siempre seremos niños-, pero después cada vez mejor, con sus propias palabras.



FUENTE:
RATZINGER, Joseph: Dios y el mundo (Libro) , , Ed.Debolsillo, 2005 Madrid p. 16


FUENTE AMPLIADA:
RATZINGER, Joseph: Dios y el mundo Ed. Debolsillo, Madrid, 2005 (2000)


CLAVES: Oración > Escuchar a Dios para aprender a hablarle