RESUMEN:
Es precepto del decálogo sobre la santificación de las fiestas es en parte natural y en parte ceremonial. Y es natural porque el hombre tiene que destinar una parte de su tiempo, igual que lo hace para dormir o comer, para el culto a Dios, que repara las fuerzas del alma en Dios.


TEXTUAL:
Ad.1 El precepto de santificar el sábado, si se entiende literalmente, es en parte moral y en parte ceremonial j. Es moral en cuanto el hombre dedica un tiempo de su vida al culto de las cosas de Dios. En efecto, existe en el hombre una inclinación natural a destinar un tiempo a sus necesidades, como pueden ser el alimento corporal, el sueño y otras semejantes. Por lo mismo, también cae bajo precepto moral el dedicar un tiempo, según el dictamen de la razón natural, a las cosas divinas y al alimento espiritual que repara las fuerzas del alma en Dios.


FUENTE:
Suma de Teología II-II, nota q.122, a.4, ad.1


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología II-II (a) Ed. BAC, Madrid, 1995 (1271)


CLAVES: Libertad religiosa > Derecho natural