RESUMEN:
Las inclinaciones no son en modo alguno limitadoras de la libertad, sino que, en realidad, más bien la provocan y la desarrollan.


TEXTUAL:
p. 473 La inclinación biológica, como el hambre y la sed, orienta el apetito de una manera determinada y constrictora. Dudaremos, sin embargo, que contraría a la libertad, pues, al alimentarse nuestro cuerpo conservamos el soporte físico necesario para nuestra acción. Las inclinaciones espirituales no son en modo alguno limitadoras de la libertad, sino que, en realidad, más bien la provocan y la desarrollan. El que tiene inclinación por una persona, por una virtud, por una ciencia o por un arte, experimenta que su libertad está excitada por el amor que siente, antes que limitada por el hecho de esta determinación.

(...) La determinación interior de una voluntad es una manifestación de su potencia, de su capacidad de imponerse y de durar. Es el signo de una libertad fuerte.



FUENTE:
PINCKAERS, Servais: Las fuentes de la moral cristiana, Ed.Eunsa, 2000 Pamplona CAPÍTULO XVII LAS INCLINACIONES NATURALES EN EL ORIGEN DE LA LIBERTAD Y DE LA MORAL


FUENTE AMPLIADA:
PINCKAERS, Servais: Las fuentes de la moral cristiana Ed. Eunsa, Pamplona, 2000 (1985)


CLAVES: Libertad > Necesidad y libertad > Inclinación natural a la felicidad y libertad