Hervada rechaza expresamente (y erróneamente) que el fundamento del derecho sea el bien común, y considera que es la dignidad del hombre como persona
p. 259 También en un autor distante de los anteriores, como Hervada, se encuentra repetidamente presente esa misma idea. Hervada rechaza expresamente que el fundamento del derecho sea el bien común, y sitúa este fundamento en la dignidad del hombre en cuanto persona[1].
(...) Dominar el propio ser no significa sólo tener la capacidad de ser sujeto de derechos, sino que significa poseer ya algo como derecho, ser originaria e inherentemente titular de un primer y fundamental derecho, que es la propiedad del ser de uno mismo. Cabe hablar, pues, de un único derecho natural fundamental: el derecho de la persona a su mismo ser, a su libertad y a su desarrollo; y es este derecho radical el que se despliega, determina y articula en una serie de derechos naturales concretos, que no cabe enumerar de manera fija y exhaustiva, porque dependen parcialmente de factores históricos y contextuales[1].
[1] Javier Hervada, Lecciones propedéuticas…, op. cit., p. 152.
[2] Ibid., pp. 524-525.