RESUMEN:
«si no se aceptara como evidente y arrebatador que el mundo está bañado de luz, es decir, lleno de sentido, no sería posible ninguna demostración»


TEXTUAL:
p. 30 (...)

es también lógico que quienes tienen fe en la creación de Dios, tal como nos es revelada en la Iglesia, que es la fe bíblica, encuentren que el mundo es sobre todo manifestación, esplendor, realidad «luminosa» entregada al conocimiento del que es imagen de Dios, y al reconocimiento de su Creador.

La condición primera de la luz en el mundo, nos dice que la forma más fundamental de conocimiento es la evidencia, el reconocimiento. Las verdades decisivas no se remiten a demostraciones presuntamente más fundamentales que ellas, sino que se afirman por sí mismas. Si estas evidencias no se dieran, si no se aceptara como evidente y arrebatador que el mundo está bañado de luz, es decir, lleno de sentido, no sería posible ninguna demostración. Lo que se requiere para captar las cosas más importantes no es agudeza racional sino contemplación, espíritu atento, apertura para llenarse de lo que se nos da. Esto no es tanto asunto de la inteligencia cuanto del amor. La sabiduría es perfección de la caridad (33).

Nota 33 «Aunque las cosas materia de fe son realidades divinas y eternas, la fe, sin embargo, en sí misma, es algo temporal en el alma del creyente. Por eso, saber lo que hay que creer compete al don de ciencia. Pertenece, en cambio, al don de sabiduría conocer en sí mismas las cosas que se creen POR CIERTA UNIÓN CON ELLAS. De ahí que el don de sabiduría corresponde más a la caridad, que une la mente del hombre con Dios» (Santo Tomás de Aquino, Summa Theologim, II-II, q. 9, a. 2 ad lum).



FUENTE:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum (Libro) , , Ed.Rialp, 1999 Madrid I. ¿QUÉ ES LA HERMOSURA?, 3. La belleza como manifestación: la «luz» en el origen de la creación


FUENTE AMPLIADA:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum Ed. Rialp, Madrid, 1999 (1998)


CLAVES: Conocimiento > Capacidad de verdad > El mundo está bañado de luz