RESUMEN:
En vista de la proximidad del hombre a la perfección de su naturaleza específica, se estima esta primera dimensión de su belleza. Y aquí se incluye tanto su belleza física, esto es, la adecuada proporción de sus miembros (incluyendo en ella la salud), como su dimensión relacional, dentro de la cual se puede distinguir a su vez una capacidad relacional sexuada, en cuyo caso el atractivo del físico está muy relacionado con su capacidad de relación, y una capacidad de relación humana personal asexuada.
TEXTUAL:
p.35

En el aspecto más elemental y primario, el individuo humano es hermoso en su corporalidad propia. En este aspecto la hermosura de la persona brilla primeramente en su cuerpo cuando éste se encuentra en su plenitud, en la salud, en el vigor de la vida pujante. Hay pues una forma de hermosura, que puede ser detectada por cualquier persona humana, y que es la hermosura del cuerpo humano en su armonía corporal, en la situación de plenitud de vida orgánica.

El cuerpo humano no es solamente un sistema biológico fascinante, es sobre todo un cuerpo espiritual su forma substancial es un alma espiritual según el aforismo clásico "anima forma corporis" , es decir, está transido de relación. Por eso el cuerpo presenta también otro tipo de hermosura, que ya no es solamente corporal biológica, sino que radica en la dimensión relacional que el alma espiritual inscribe en el cuerpo. En la mirada, en el rostro, en los gestos y, en general en los aspectos más relacionales del cuerpo humano advertimos una hermosura que va más allá de lo que es estrictamente material.

De otra forma distinta, los hombres experimentan una orientación hacia algo, de una manera particular, como la tienen, por ejemplo, hacia aquello que satisface alguna de sus necesidades «naturales», que actualiza alguna de sus potencias. En estas realidades que cumplen, o le ayudan a cumplir, su teleología, la persona advierte cierto esplendor. Por esto ciertos paisajes o visiones del mundo aparecen hermosos en su serenidad, o en su atractivo físico, o en su armonía.

Una forma de belleza particular, basada en este aspecto que comentamos, es la vinculada al placer que causa contemplar el cuerpo humano sexuado en cuanto se muestra como objeto deseable para otro ser dotado de la sexualidad complementaria. Ésta es una forma de belleza que se basa en aquel componente de la teleología de la naturaleza corporal que es la inclinación a la relación sexual. Veremos enseguida que éste no es el único ni el principal componente de la atracción propia del amor sexuado, pero es uno de sus elementos más evidentes.

Todas estas formas de belleza se basan en la naturaleza específica que es común a todos los seres humanos. Por esto son formas de belleza igualmente accesibles a todos los individuos de la especie humana, haciendo únicamente la precisión de que en la hermosura de la corporalidad sexuada hay que tener en cuenta la complementariedad de los dos sexos.

FUENTE:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum (Libro) , , Ed.Rialp, 1999 Madrid I. ¿QUÉ ES LA HERMOSURA?, 4. Universalidad y relatividad de la hermosura. b) La hermosura basada en la teleología natural del ser humano
FUENTE AMPLIADA:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum Ed. Rialp, Madrid, 1999 (1998)
CLAVES: Belleza > Corresponde a la triple teleología del hombre > Correspondencia con la naturaleza humana común