RESUMEN:
«La potencia apetitiva inferior no se inclina naturalmente a una cosa determinada más que después de serle propuesta bajo la razón del objeto propio, como es manifiesto por lo dicho. De donde, por tener la razón potestad para proponer una única y misma cosa bajo diversos aspectos, por ejemplo un alimento como deleitoso o como mortífero, ella puede impulsar la sensualidad hacia objetos diferentes. »


TEXTUAL:
ARTÍCULO 4 ¿Obedece la sensualidad a la razón?

Argumentos por los que parece que no está sujeta a la razón y respuesta de Sto. Tomás

Arg. 4. Las fuerzas naturales en nosotros no están sujetas a la razón. Pero la sensualidad tiende con ímpetu natural hacia su propio apetecible. Luego el movimiento de la sensualidad no está sujeto a la razón.

Ad. 4. La potencia apetitiva inferior no se inclina naturalmente a una cosa determinada más que después de serle propuesta bajo la razón del objeto propio, como es manifiesto por lo dicho. De donde, por tener la razón potestad para proponer una única y misma cosa bajo diversos aspectos, por ejemplo un alimento como deleitoso o como mortífero, ella puede impulsar la sensualidad hacia objetos diferentes.



FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Opúsculos y cuestiones selectas, vol. 2 (Libro) , , Ed.BAC, 2003 Madrid Q. SOBRE LA SENSUALIDAD, Art.4 ¿Obedece la sensualidad a la razón? (De Veritate, q.25)


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Opúsculos y cuestiones selectas, vol. 2 Ed. BAC, Madrid, 2003


CLAVES: Apetitos del hombre > Contrarios a la razón?