RESUMEN:
La circunstancia agravante no siempre cambia la especie de maldad, sino que a veces la sola cantidad.


TEXTUAL:
4. Toda circunstancia agravante hace la diferencia en cuanto a la malicia, que es de algún modo sustancia de pecado en cuanto es pecado. Pero lo que hace la diferencia en la substancia cambia la especie. Luego, toda circunstancia agravante varía la especie de pecado.

4. A LO CUARTO debe decirse que la circunstancia agravante no siempre cambia la especie de maldad, sino que a veces la sola cantidad.



7. El pecado toma su especie del objeto. Pero según cualquier circunstancia, al menos agravante, es modificado el objeto en bondad y maldad. Luego, toda circunstancia agravarte da su especie al pecado.

7. A LO SÉPTIMO debe decirse que una circunstancia agravante, ciertamente, modifica la maldad del objeto, pero no siempre de la especie, sino a veces sólo de la cantidad.



FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal (Libro) , , Ed.Eunsa, 1997 Pamplona q.2 [Sobre los pecados], a.7 [Si alguna circunstancia que no confiere su especie al pecado agrava el pecado], ob.4 y ad.4


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal Ed. Eunsa, Pamplona, 1997 (1268)


CLAVES: Acto humano > Circunstancias